Crisis y transición ecológica: ¿ilusión desarrollista o giro eco-territorial?
- Matías Khoury (F.Soc. UBA)
- Agustina Chover (F.Soc. UBA)
Desde una perspectiva epistemológica del Sur global, nos proponemos abordar lo que actualmente se denomina crisis civilizatoria (Sousa, 2009) y algunas posibles alternativas locales que buscan una salida de la misma, en una suerte de transición ecológica o giro eco-territorial (Svampa, 2011) donde prevalece una visión ecológica, de respeto del medioambiente.
Entendemos por crisis civilizatoria un concepto amplio y multidimensional, a escala global, que busca abarcar diversas áreas que involucran a toda la humanidad.
En tal sentido, distintos autores plantean una crisis disciplinaria, en cuanto a que la ciencia persiste en patrones disciplinares que continúan dominando los esquemas de producción del conocimiento, a pesar de varias décadas de producción de conocimiento social sobre el funcionamiento de la ciencia y su papel en la resolución de problemas sociales, con nuevas propuestas conceptuales asociadas a la multi e interdisciplina, a un diálogo de saberes (entre conocimientos académicos y conocimientos ancestrales de distintas comunidades indígenas, campesinas, etc.), a los procesos de participación pública, co-producción de conocimientos y ciencia abierta (Alier, 1992; Baber et al., 1995; Shinn and Joerges, 2002; Rodriguez-Medina et al., 2019).
Asimismo, se plantea una crisis o colapso ecológico aproximadamente en 1960 con los primeros trabajos académicos, que empieza a presentarse como irreversible si la humanidad no comienza a tomar cartas en el asunto de forma seria. Como consecuencia, comienzan a entrar en juego debates sobre el desarrollo sostenible, como posible alternativa al desarrollo económico tradicional. El término resultó ambigüo, siendo utilizado para distintos intereses. Más allá de los rótulos que se utilicen y las corrientes que derivan del término conceptual, la importancia radica en determinar cómo se abordan cuestiones claves como el papel que desempeñan los límites ecológicos, las concepciones sobre la apropiación y uso de los recursos naturales, el papel de la ciencia y la tecnología, o los modos de debatir y tomar decisiones (Gudinas, 2004; Svampa y Viale, 2014; Conferencia de Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente Humano, 1972; Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, 1992; Informe Brundtland, 1987).
Por otro lado, el mencionado giro eco-territorial alude a un cambio de época en América Latina, atravesada por procesos sociales y políticos: el avance de las luchas indígenas, las denominadas olas progresistas y, en el caso de Argentina, en las últimas décadas se han multiplicado las resistencias campesino-indígenas y, principalmente, los movimientos socioambientales. Pese a dicha tendencia, simultáneamente se advierte como otro de los aspectos más destacados, la expansión del modelo extractivo-exportador y los grandes proyectos de infraestructura, los cuales han disparado una “ilusión desarrollista” en la región, ya que las economías latinoamericanas se vieron favorecidas por los altos precios de los productos primarios (commodities). En tal sentido, los primeros progresismos gobernantes han enfatizado la extracción de recursos naturales, conformándose una agenda ambiental superficial, o donde solamente se aprovechan acciones que sean funcionales a ese crecimiento económico (Gudynas, 2010; Svampa, 2011; Linera, 2022).
Para contribuir al abordaje complejo de una actual crisis civilizatoria (focalizando en la crisis socioambiental), en simultáneo a una suerte de giro eco-territorial en la región, finalmente analizaremos experiencias en Argentina a escala local que, de acuerdo a nuestra perspectiva, ilustran estas dos tendencias a escala global. Tomaremos como referencia principalmente las experiencias agroecológicas que consideramos asociadas a una posible transición ecológica o giro eco-territorial y, por otro lado, experiencias de extracción de litio (de las más novedosas en Argentina) que encontramos relacionadas a la degradación y crisis ambiental. Se trata de experiencias que consideramos como parte de una crisis socioambiental, ya que implican tensiones territoriales de modelos de desarrollo y actores sociales en disputa.