El trabajo se propone identificar en los cambios en las relaciones jurídicas laborales las transformaciones del proceso de acumulación de capital en Argentina a partir de la nueva división internacional del trabajo
En relación a la fuerza de trabajo, estos cambios tomaron cuerpo en un aumento de su fragmentación y en la degradación en sus condiciones de reproducción. En este sentido, el propósito es dar cuenta de la expresión jurídica que asume este fenómeno.
Tomamos como punto de partida la forma general que asumió la venta de la fuerza de trabajo en la etapa previa. Ésta se caracterizó por la existencia de condiciones mínimas y generales de reproducción de la fuerza de trabajo a través de la Ley de Contrato de trabajo (LCT) y a partir de ahí, la diferenciación de la misma expresada en los Convenios Colectivos de Trabajo por ramas de actividad.
En la etapa siguiente observamos tres grandes transformaciones en las condiciones de reproducción de la clase obrera que expresan su deterioro y fragmentación. En primer lugar, aumenta la porción de la fuerza de trabajo que queda fuera de la anterior forma general a través del crecimiento de la informalidad y el desempleo. En segundo lugar, se precarizan las condiciones de venta de la fuerza de trabajo para aquella porción de la clase obrera que se mantiene dentro de la anterior forma general a través de las leyes de flexibilización laboral, la tercerización laboral y la flexibilización de los convenios colectivos de trabajo. Por último, las leyes de monotributo implican una forma de contratación que directamente niega la relación laboral, pero establece condiciones de reproducción propias de una fuerza de trabajo.
A partir de estas tres formas generales que asume el fraccionamiento y degradación, nos interesa conocer las formas específicas a partir de la configuración jurídica que asumen las mismas.