A partir de la década del ‘70 del siglo pasado, con la caída del pleno empleo y las transformaciones del Estado de bienestar, se desarrolló un proceso de precarización y exclusión del mercado del trabajo. Estos procesos tuvieron consecuencias profundas en los y las jóvenes, desarrollándose una brecha generacional que se ha ido ampliando con el tiempo, complejizando la inserción laboral de las juventudes. Es decir, la transición al mercado laboral y la posterior estabilización no siempre suceden y, cuando se presentan, son el resultado de experiencias precarias, reiteradas entradas y salidas del mercado, y altos grados de inseguridad laboral.
Así, una de las principales estrategias que implementan las/os jóvenes para beneficiar sus trayectorias laborales, es la adquisición de credenciales educativas que mejoren sus condiciones de empleabilidad. Sin embargo, en la actualidad se presenta el fenómeno de la devaluación de las credenciales educativas.
En este marco, en el presente trabajo se propone analizar las transiciones al mercado de trabajo de las y los jóvenes con nivel superior completo e incompleto residentes en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), entre los años 2011 y 2021. La delimitación territorial responde a que allí se encuentra la mayor densidad poblacional del país y es, a su vez, el espacio geográfico donde más Universidades Nacionales se han emplazado en las últimas tres décadas (De Angelis, 2014).El recorte temporal también se vinculada a este aspecto, ya que el análisis de los últimos diez años considera la creación de las nuevas casas de estudio de nivel superior en el territorio delimitado.
El abordaje es de tipo cuantitativo y comprende un conjunto de indicadores que ponen especial énfasis en el mercado de trabajo, los cuales fueron construidos a partir de los datos provistos por la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).
Las conclusiones alcanzadas destacan la importancia de estudiar a los jóvenes como población en particular, debido a las diferencias y características particulares en lo referente a indicadores de empleo respecto de la población total del país. En la dimensión territorial, se observa un mejor panorama en relación con los indicadores de empleo para aquellas y aquellos jóvenes que residen en el AMBA. Finalmente, las variables de finalización de estudios superiores, tanto como el sexo y la edad, se constituyen como aristas de corte que resultan centrales para pensar al interior de las juventudes la transición al mercado laboral.